Si no sabes lo que pierdes...(15ª parte)
La rebelión no es contra el hombre como tal, es contra el pasado del hombre y la mujer juntos. Y entonces esta rebelión tendrá la calidad de religiosidad que dará gracia a la gente, gratitud a la gente. Espero que esté clara la diferencia que ha surgido entre la mujer oriental y la occidental. Esto no pasaba antes de este siglo.
He oído: El presidente Ronald Reagan, mirando fijamente al fondo de un volcán griego comentó: 'Parece el infierno!'.
'Ah!, vosotros los americanos', dijo el guía, 'estáis en todas partes!'.
Las mujeres occidentales se han vuelto más cultas, han estado por todas partes. Se han dado cuenta de cosas de las que las mujeres orientales, son todavía absolutamente inocentes. En su inocencia hay gracia, una cierta belleza que no es de este mundo, que te da cierta indicación del más allá. Ese tendría que ser el caso de cada mujer en el mundo. Cada mujer se puede convertir en la flecha hacia la divinidad; su gracia, su belleza, su amor, su devoción, te pueden mostrar el camino hacia los más altos reinos de tu ser, hacia los más grandes espacios de la consciencia.
Las mujeres no sólo son capaces de dar vida a niños, sino que también son capaces de darse vida a sí mismas, como buscadoras de la verdad. Pero este lado de la mujer todavía no ha sido explorado para nada. Quisiera que mi gente rebelde explorara también este lado.
El Rebelde 15 de Junio de 1987 por la mañana