Zen - Sexo - Salud
El Zen no tiene ningún sistema de creencias en absoluto, y eso incluye tambiénel sexo: el Zen no dice nada al respecto. Y esto debería ser lo supremo. El Tantra tiene una actitud sobre el sexo. ¿Cuál es la razón? Intenta reparar lo que la sociedad ha hecho. El Tantra es medicinal. La sociedad ha reprimido el sexo; el Tantra surge como remedio para ayudarte a reestablecer el equilibrio. Te has inclinado demasiado hacia la izquierda; El Tantra viene a ayudar a que te inclines hacia la derecha. Y, para reestablecer el equilibrio tienes a veces que inclinarte mucho a la derecha. Sólo entonces lo re-estableces.
¿Acaso no has visto al que camina sobre la cuerda floja? Lleva una vara en las manos para mantener su equilibrio. Cuando siente que se está inclinando demasiado hacia la izquierda, se inclina inmediatamente hacia la derecha. De nuevo cuando siente que se inclina demasiado hacia la derecha, comienza a inclinarse hacia la izquierda. Es así como se mantiene en el centro.
La sociedad ha creado una mente represiva, una mente negativa ante la vida, una mente anti-gozo. La sociedad está muy en contra del sexo. ¿Por qué está la sociedad tan en contra del sexo? Porque si admites en la gente su placer sexual, no la puedes esclavizar. Es imposible; una persona gozosa no es esclavizable. Ese es el truco. Sólo las personas tristes son esclavizables. Una persona gozosa es una persona libre; guarda cierta independencia.
No puedes reclutar gente feliz para ir a la guerra. Es imposible. ¿Por qué irían a la guerra? Pero, si una persona tiene su sexualidad reprimida, está dispuesta a ir a la guerra, está ansiosa por ir a la guerra, porque no ha sido capaz de gozar de la vida. Se ha vuelto incapaz de gozar, por lo tanto se ha quedado carente de creatividad. Puede hacer una sola cosa: Puede destruir. Todas sus energías se han vuelto venenosas o destructivas. Está listo para ir a la guerra; no está solamente listo sino que lo anhela. Quiere matar, quiere destruir.
De hecho, mientras destruye a otros seres humanos tendrá el placer sustituto de la penetración. Esa penetración se podría haber hecho con amor y hubiera sido hermosa. Cuando penetras el cuerpo de una mujer con amor, sucede algo espiritual. Pero, cuando las cosas se complican y penetras el cuerpo de alguien con una espada, con una lanza, eso es feo, es violento, es destructivo. Estás con ello buscando un substituto a la penetración.
Las personas que aman bellamente no pueden nunca ser destructivas. La gente que puede amar bellamente y gozar de la vida tampoco es competitiva. Ése es el problema.
Por eso, las personas primitivas no son tan competitivas. Están gozando de la vida. ¿Para qué molestarse en tener una casa más grande? ¿ Para qué molestarse en tener una cuenta más grande en el banco? ¿Para qué? Estás contento con tu mujer o con tu hombre y estás danzando con la vida. ¿Quién va a querer sentarse en el mercado por horas y horas, todos los días, todos los años, esperando poder tener una gran cuenta en el banco al final, para poder retirarse y gozar? Ese día nunca viene. No puede llegar, porque toda tu vida te has mantenido como un ascético.
Recuerda, la gente de negocios es gente ascética. Se han consagrado por completo al dinero.
Estará feliz si puede conseguir su pan diario. Ese es el sentido de la oración de Jesús: Danos el pan de cada día'. Eso es más que suficiente. Ahora, Jesús parece que fuera un tonto. Debió haber pedido: 'Danos una cuenta bancaria más grande'. Pidió solo el pan diario. Un hombre gozoso nunca pide más que eso. El gozo da mucha plenitud.
Solamente los seres que no están plenos son competitivos, porque piensan que la vida no está aquí, que está allá. 'Tengo que llegar a Delhi y volverme presidente,' o a la casa Blanca y volverme esto o aquello. 'Tengo que ir allá, el gozo está allá' ― ya que saben que aquí no hay gozo, están siempre a las carreras, yendo de aquí para allá. Están siempre en movimiento sin nunca llegar. Y el hombre que conoce el gozo, está aquí. ¿Por qué tendría que ir a Delhi? ¿Para qué? Está totalmente feliz aquí y ahora. Sus necesidades son muy pequeñas. No tiene deseos. Tiene necesidades ciertamente, pero no tiene deseos. Sus necesidades pueden ser satisfechas, pero los deseos nunca. Las necesidades son naturales, los deseos son pervertidos.
La sociedad entera depende de una sola cosa y ésta es la represión sexual. De otra manera se destruiría, se sabotearía la economía. La guerra desaparecería y con ella toda la maquinaria de guerra y la política perdería sentido y los políticos no tendrían importancia. El dinero no tendría valor si a la gente se le permitiera amar. Ya que no se les permite amar, el dinero se vuelve el sustituto, el dinero se convierte en su amor. Existe, por tanto, una estrategia sutil.
Sólo el amor liberado en el mundo puede traer la revolución. El comunismo fracasó, el fascismo fracasó, el capitalismo fracasó. Todos los 'ismos' han fracasado porque en lo profundo reprimen la sexualidad. En ese punto no hay diferencia entre ellos ― no hay diferencia entre Washington y Moscú, Beijing y Delhi ― no hay diferencia en absoluto. Todos están de acuerdo en una cosa: que el sexo debe ser controlado, que a la gente no se le debe permitir el gozo inocente encontrado en el sexo.
Para reestablecer el balance viene el Tantra; el Tantra es un remedio. Enfatiza por tanto, mucho sobre el sexo. Las llamadas religiones dicen que el sexo es pecado y el Tantra dice que el sexo es el único fenómeno sagrado. El Tantra es un remedio. El Zen no es un remedio. El Zen es el estado que alcanzas cuando desaparece la enfermedad y por supuesto con ella, el remedio también. Una vez que estás curado de tus enfermedades dejas de cargar la prescripción y la botella de la medicina contigo. Te deshaces de ella, se va a la basura.
La sociedad ordinaria está en contra del sexo. El Tantra viene para ayudar a la humanidad, para devolverle el sexo a la humanidad. Cuando el sexo ha regresado entonces surge el Zen. El Zen no tiene actitud.
The Diamond Sutra, #2 (sin traducir)