La meditación es un modo de asentarse en uno mismo, en el núcleo más interno de tu ser. Una vez que hayas encontrado el centro de tu existencia, habrás encontrado tus raíces y tus alas.        

Las raíces están en la existencia, haciendo de ti un ser humano más integrado, un individuo. Y las alas están en la fragancia que se libera al estar en contacto con la existencia. La fragancia consta de libertad, amor, compasión, autenticidad, sinceridad, sentido del humor y un tremendo sentimiento de felicidad.             

Las raíces te hacen un individuo, y las alas te dan la libertad de amar, de ser creativo, de compartir incondicionalmente la alegría que has encontrado. Las raíces y las alas se juntan. Son los dos lados de una misma experiencia, y esa experiencia es encontrar el centro de tu ser. 

Estamos moviéndonos  continuamente en la circunferencia, siempre en algún otro lugar, lejos de nuestro propio ser, siempre en dirección hacia los demás. Cuando todo esto es desechado, cuando todos los objetivos son abandonados, cuando cierras los ojos a todo lo que no eres tú- incluso tu mente, tus latidos son dejados muy atrás - sólo un silencio permanece. 

En este silencio irás asentándote lentamente en el centro de tu ser, y luego las raíces crecerán por sí mismas, y las alas también. No necesitas preocuparte por ellas. No hay nada que puedas hacer al respecto. Vienen por sí mismas. 

Tú simplemente cumples con una condición: estar en casa; y toda la existencia se convierte en una dicha para ti, en una bendición.

Osho: The Osho Upanishad, # 9

La revolución interna trae libertad y la única manera de atravesar esta revolución interna uno mismo es meditando. Meditar simplemente significa aprender a olvidar todo lo que has aprendido. Es un proceso de descondicionamiento, un proceso de de-hipnosis. 

La sociedad ha agobiado a todo mundo con miles de pensamientos. La meditación simplemente te ayuda a salir de ese mundo de pensamientos, entrando en un estado de silencio. Es el proceso de limpiar la pizarra por completo, vaciándote de todo lo que ha sido forzado y metido dentro de ti.

Una vez que estás vacío, espacioso, silencioso, limpio, la revolución se produce, el sol sale. ¡Entonces vives en su luz! Y vivir en la luz de tu sol interior es la manera correcta de vivir. De hecho es la única manera de vivir. Otros sólo están muriendo, sólo mueren lentamente, avanzando en una fila que se vuelve más y más corta, y en cualquier momento tal vez tú seas el primero de la fila. De hecho, todo el mundo está tratando de ser el primero de la fila, con un enorme deseo de ser el primero en todas partes. 

Solamente a la vida ordinaria se le llama vida; no lo es. Es sólo lo que se denomina como vida. Es un proceso de muerte gradual o, para ser más preciso, un proceso de suicidio gradual. 

Cuando te vuelves silencioso, alerta y claro, y tu cielo interior está lleno de deleite, conoces por primera vez el sabor verdadero de la vida. Uno puede darle el nombre de dios, puede llamarlo iluminación, puede llamarlo liberación; la experiencia de la verdad, el amor, la libertad, la felicidad; se le pueden dar diferentes nombres, pero el fenómeno es el mismo. 

Osho: Nirvana Now or Never, #14